La L-glicina es un aminoácido no esencial, pero cumple funciones fisiológicas clave en todas las etapas de la vida. En determadas condiciones, cono el crecimiento rápido, enfermedad, estrés fisiológico o envejecimiento puede volverse condicionalmente esencial, ya que su síntesis endógena no alcanza a satisfacer las demandas metabólicas (Amino acids: metabolism, functions and nutrition, 2009). Su importancia radica en que participa en la síntesis de colágeno, el glutatión (un potente antioxidante endógeno), neurotransmisores inhibitorios y compuestos como purinas y porfirinas, esenciales para el desarrollo y mantenimiento celular. Estudios han demostrado que en situaciones de alta demanda, como en neonatos, adolescentes activos o adultos mayores, una mayor disponibilidad de glicina puede mejorar la resistencia al estrés oxidativo, la calidad del sueño y favorecer la salud metabólica y tisular (Glycine prevents high sucrose-induced hepatic oxidative stress and fibrosis, 2003)
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Fortalezas clave en niños: "Crecimiento y desarrollo" la glicina es esencial para la síntesis de colágeno, que constituye una gran parte de los tejidos conectivos, la piel, vasos sanguíneos y huesos. "Formación del sistema nervioso central" actúa como neurotransmisor inhibidor en el sistema nervioso central en desarrollo, ayudando a regular la excitabilidad neuronal. "Maduración intestinal" tiene un papel importante en la protección y mantenimiento de la integridad de la mucosa intestinal. "Síntesis de proteínas y nucleótidos" es precursor de porfirinas, purinas y glutation, esenciales para el crecimiento celular y la defensa antioxidante. En lactantes prematurs o niños con enfermedades crónicas, la glicina puede volverse limitante. Fortalezas clave en adolescentes: "Síntesis de colágeno y masa muscular" durante el estirón puberal, la glicina es necesaria para el crecimiento de tejidos estructurales. "Regulación del sueño" se ha relacionado con mejoras en la calidad del sueño debido a su efecto modulador del sistema nervioso. "Producción de glitatión" su papel antioxidante ayuda a contrarrestar el estrés oxidativo aumentado durante la adolescencia, especialmente en adolescentes físicamente activos. Fortalezas clave en adultos: "Función antiinflamatoria y antioxidante" la glicina modula respuestas antiinflamatorias y protege contra el daño celular al favorecer la síntesis de glutatión. "Salud metabólica" se ha asociado con la regulación de la glucemia y la sensibilidad a la insulina, siendo relevante en adultos con síndrome metabólico o resistencia a la insulina. "Salud articular y dérmica" favorece la regeneración de tejidos conectivos y la elasticidad de la piel al intervenir en la producción de colágeno. "Neuroprotección y sueño" mejora la calidad del sueño y puede tener efectos neuroprotectores en adultos mayores. "Rol terapéutico portencial" la glicina ha mostrado beneficios potenciales en pacientes con enfermedades hepáticas no alcohólicas, enfermedades inflamatorias intestinales, artritis y enfermedades articulares degenerativas. "Metabolismo energético y desintoxicación" participa en la síntesis de creatina, importante para el redimiento muscular y energético, contribuye a la conjugación de ácidos biliares y a la eliminación de xenobióticos en el hígado, importante en la homeostasis del nitrógeno, facilitando el metabolismo de otros aminoácidos y la excreción de productos nitrogenados.